La cronología o fórmula de los dientes sirve para expresar las características y la cantidad de dientes de los animales, entendiendo que cada uno de ellos pueden llegar a tener diferentes características funcionales y morfológicas. A su vez, sirve para poder determinar la edad de los mismos. En la jerga rural esto se lo conoce como “bloqueo”.
Al igual que muchos otros mamíferos, los bovinos son animales que nacen con una dentadura temporal que los acompaña al principio de sus vidas. Estos son dientes de leche que están compuestos por incisivos y premolares, luego son reemplazados por dientes permanentes. En el caso de los terneros, estos dientes pueden desarrollarse en los últimos dos meses de gestación y las primeras semanas de nacimiento.
Los dientes incisivos están compuestos por 4 piezas y son los que se usan para poder identificar la edad de los animales.
En la parte de arriba no tienen dientes, sino que tienen un rodete dentario, una suerte de encía reforzada y gruesa en la cual choca el alimento que es empujado por la lengua y los incisivos inferiores.
Tanto en la parte superior como inferior no poseen ni colmillos ni los primeros premolares. Si tienen el resto de los premolares y molares.
Los dientes temporales son 20, compuestos por 8 incisivos inferiores y ausencia en los superiores, y 6 premolares superiores y 6 inferiores.
Los dientes definitivos o permanentes están formados por 32 piezas: 8 incisivos en la parte inferior y ninguno en la parte superior, sin colmillos, 6 pre-molares superiores y 6 inferiores y 6 molares superiores y 6 inferiores.
El nombre de sus dientes va de la mano con su funcionalidad. Los incisivos, sirven para incidir, cortar el alimento, mientras que los molares, para moler, triturar el alimento que fue cortado previamente.
Las piezas dentarias están formadas por tejidos blandos como es la pulpa dentaria y por tejidos duros como el esmalte, la dentina y el cemento que actúan como protección.
Los procesos evolutivos por los cuales pasan son erupción o aparición, desarrollo y desgaste. Estos procesos son los que se observan cuando uno quiere observar la edad por medio del estado de los dientes.
Los incisivos tienen una forma de pala ancha, teniendo la corona y la raíz bien separada por un cuello bien distinguido. La corona es la parte que uno logra ver, que está a la vista y que en este caso es de forma rectangular, ligeramente ovalada y achatada de arriba.
El desgaste empieza por la parte del borde anterior y por la cara posterior. Al Ángulo externo se lo conoce como aval, a la vista es la parte de arriba del diente que tiene una forma cóncava y es lo que se puede observar a medida que va desgastando.
Cuando esto sucede, si uno ve el diente desde arriba, se puede ver la cavidad pulpar, como una figura cuadrada al principio y redondeada cuando ya está muy avanzado el desgaste. A diferencia de la corona, esta parte se va renovando con una dentina que actúa como protección.
La corona al no tener la capacidad de ser renovada, y con un crecimiento limitado, puede llegar a quedar al ras de la encía y formar como una suerte de tablón que va de manera paralela a la misma y generando la incapacidad de cumplir su función, ya que no logran apretar el alimento con el rodete dentario que poseen en la parte superior.
A su vez, cuando la situación es extrema, estos dientes empiezan a gastarse no solo en la parte de arriba, sino que también en la parte de los costados, haciendo que haya una separación pronunciada entre ellos. Empiezan a tomar una forma triangular donde se puede observar la parte cercana a la raíz y la corona bien ancha, y la corona en forma de flecha.
Edad de los bovinos según el estado dentario
Las características y estados de los dientes pueden ayudarnos a calcular de manera aproximada la edad de los bovinos, y poder determinar la vida útil del mismo.
La aparición de los dientes de leche se va dando de manera ordenada, expresándose primero las pinzas y los primeros medios a los 8 días de nacidos y luego los segundos medios y los extremos en los primeros 15 y 30 días. Todo esto depende de la genética de cada uno de los animales y sus niveles de precocidad.
Estos dientes sufren su primer desgaste notable entre los 5 y 8 meses, emparejándose entre ellos entre los 10 y 20 meses de edad del animal. Esto está ligado íntimamente con la edad de destete y la dieta que tengan. Cuanto antes se desteten, antes van a consumir pastos, y cuanto más duros sean estos pastos, más rápido va a ser el rasamiento de la dentadura.
La aparición y sustitución por los dientes permanentes depende de cada animal y varían en cuanto a tiempo en cada uno de ellos. Las pinzas definitivas, pueden llegar a aparecer dentro los 18 y 28 meses, los primeros medios, entre 24 y 36 meses, los segundos medios entre 36 y 48 meses y por último, los cantos entre 48 y 60 meses.
A medida que pasan los años, los dientes se van desgastando, y van tomando una forma triangular, lo que nos permite, según la gravedad de este desgaste, determinar de una manera aproximada la edad del animal.
Saber la edad de las vacas sirve para saber su vida útil, en qué estado está el rodeo y cuántas vacas uno va a tener que reponer, también poder observar si el alimento que uno le está dando, incide de manera negativa en el desgaste precoz de los dientes, saber que está comprando, etc.
En términos generales a los 5 años las vacas tienen su dentadura completa, o “boca llena” y con un buen manejo y una dieta adecuada no debería de tener problemas para con el desgaste de los mismos. Por lo general los pastos duros y la poca salivación son cuestiones que hacen un desgaste mayor.